Hemos pasado unos meses viviendo en Valladolid y esto nos ha dado la oportunidad de probar muchos locales –quedan muchísimos más pendientes– donde se come bien. Pequeñas tabernas, cocina internacional, menús de autor… La ciudad castellana ofrece una impresionante oferta para quienes quieren disfrutar de la comida lejos de las grandes urbes del país. ¿Dónde comer en Valladolid? Hemos preparado una pequeña guía, que iremos ampliando, con algunos de los locales que más nos han gustado. Hay referencias de todo tipo y esperamos ampliarlas con nuevas visitas a la ciudad. ¿Empezamos?
Pera Limonera: un chiringuito cool
Pera Limonera es un chiringuito instalado en la playa fluvial de Valladolid. Ya te hablamos de él en nuestro artículo sobre los mejores brunch de Valladolid. Como disfrutamos mucho con ese primer desayuno de mediodía, regresamos en un par de ocasiones más a probar su carta.

El espacio es único para pasar una soleada mañana de invierno o disfrutar del atardecer sobre el Pisuerga. Si a esto le sumas un servicio joven, aplicado y dinámico y unos platos ricos y con precios muy justos, el cóctel es perfecto.
Aunque lo que más destacan en su web son los arroces, nosotros no los hemos probado por el momento. Sí que disfrutamos su croqueta de jamón, su yakitori de pollo a baja temperatura o su brioche de costilla, entre otras cosas.
Tampoco podemos dejar de recomendar la ensaladilla rusa con gambas que sirven o las alcachofas confitadas con parmentier trufado, yema curada, morcilla y papada ibérica. Ideal para una cita romántica, ir con amigos o llevar a la familia
Pera Limonera tiene, además, un menú del día por 15 euros de lunes a viernes. Incluye un snack, dos primeros y dos segundos a elegir y postre.
Milana Beer House: plan informal
Un ambiente informal, con una carta pequeña pero resultona y, sobre todo, una excelente carta de cervezas. Esto es lo que encontramos en Milana Beer House, un local situado en la calle Paraíso, muy cerca de la catedral de Valladolid.
Es un espacio interesante por su programación cultural y gastronómica, que incluye catas de cerveza, promociones, sábados de Beermut y menú internacional, conciertos acústicos o su famoso arroz con bogavante de los domingos. Por 18 euros, Milana Beer House ofrece un menú del día con un entrante, primero, segundo y postre.
Su carta es sencilla, pero muy adecuada para tomar unas buenas cervezas con amigos: torreznos, calamares…y unos exquisitos bocatas que seguramente no te podrás terminar. Interesante espacio para pasar un rato con colegas o para un picoteo informal.
Patio de Triana: sabor andaluz
Con un 3,8 de puntuación en Internet con casi mil reseñas, el Patio de Triana es un local que recuerda a esas tabernas del sur de España. Situado en la calle Los Moros, 6, este espacio es ideal para sentarse en la terracita, abrir una botella de vino y probar unas raciones.
¿Qué recomendamos? Los boquerones fritos en adobo, el pulpo braseado y la gamba blanca de Huelva. Tienen también unas tostas grandes como la de Bacalao Ahumado o la de Jamón Ibérico que pueden completar perfectamente cualquier aperitivo. Y si vas con más hambre, te recomendamos mirar su capítulo de carnes.
Quizá tenga un precio por encima del ticket medio de la ciudad, pero para nosotros era perfecto para un picoteo ocasional. También ofrece un menú diario por 17 euros y los jueves de cocido, con reserva previa.
Los Zagales: tapas originales

Un clásico de los clásicos dentro de los restaurantes de Valladolid. Durante años, este local se ha convertido en un referente gracias a sus imaginativas tapas, con las que han ganado diversos concursos nacionales e internacional.
Aunque tiene una sala a la que acudir para comer de carta –y con un menú de tapas, por si quieres probar sus famosos trampantojos– lo mejor es quedarse en la parte del bar y hacer una amplia selección de sus mejores pinchos.
Propuestas como el Tigretostón, Aroma o Pata Negra son clásicos de su carta de barra. Y si los complementas con La velada perfecta, Obama en la casa blanca y Sensaciones, disfrutarás de bocados llamativos, provocadores y con los que podrás conquistar a cualquier invitado.
Por supuesto, la carta de barra se completa con otros platos como los huevos rotos con jamón, ensaladas, tostadas, etc.
Los Zagales está muy cerca del ayuntamiento de Valladolid. Los encontrarás en el número 13 de la calle Pasión.


Los ilustres: cocina tradicional hoy
Viajamos a escasos 50 metros de la catedral de Valladolid para entrar en un local reciente y que se está convirtiendo en el punto de encuentro de moda para los vallisoletanos: Los ilustres.
Su salón es elegante, cómodo y su terraza es perfecta para las largas veladas de verano. Un servicio profesional –quizá un poco lento– y una carta tradicional y bien preparada hacen que sea un local digno de recomendar.
Los ilustres, del grupo Día y noche, ofrece propuestas de temporada y una carta en la que destacan platos como el salpicón de mariscos con aromas de hierbabuena y fresas, los langostinos pelados al estilo castellano con huevo frito campero o el lechazo IGP en Lingote.
Estos son los principales locales que te hemos probado en Valladolid y que más nos han gustado. Ampliaremos poco a poco la lista, puesto que es una ciudad que nos encanta y que visitamos varias veces al año.
Te recomendamos visitar alguno de estos locales y, antes o después, conocer más a fondo la ciudad con un tour guiado como el Free Tour por Valladolid, que te permitirá descubrir los mejores rincones de esta maravillosa ciudad castellana.
Nuestro Top
Durante nuestra estancia temporal en Valladolid, dedicamos varios artículos de la web a distintos locales de la ciudad. Son espacios que, por la originalidad de su propuesta o por lo que nos gustaron, en su momento se convirtieron en nuestros lugares favoritos, a los que regresamos en varias ocasiones.
No podemos terminar esta lista sin recomendar Crisol y Laboratorio, los dos espacios de Alquimia, un local que apuesta por la cocina de vanguardia con una mirada internacional.
También nos gustó bastante Trasto, una propuesta de Teo Rodríguez con un excelente menú degustación y que también apuesta por opciones de tapas en la terraza y en la zona de bar. Reina el sabor, el cuidado del producto y la originalidad.
Y cerramos con Habanero. Este pequeñísimo local dedicado a la comida urbana de México es el lugar ideal para todos los momentos: una cerveza de mediodía, una cena familiar o una cita. Apuestan por una carta breve donde predominan los sabores tradicionales del país latinoamericano.