Hoy os vamos a hablar de un restaurante que fue toda una sorpresa. El último cumpleaños de Daniel lo pasamos en Segovia y buscamos un sitio por la zona para ir a celebrarlo. Nos recomendaron un restaurante llamado El Riscal, en Carbonero el Mayor, que fue todo un acierto.
La carne
Sin duda la carne buey a la piedra es la estrella del menú. La carne se sirve fileteada y en crudo junto a piedras calentadas a altas temperaturas. Dado que las raciones son abundantes (de ahí su precio, unos 30 euros por persona) lleva un tiempo poder terminarlas. Durante ese tiempo, los camareros van cambiando las piedras para que siempre estén con la temperatura óptima.
Además, es importante destacar que los propietarios comenzaron hace unos 15 años a criar sus propios bueyes. Los animales son seleccionados en criaderos de lidia y se trasladan hasta Carbonero el Mayor, donde pasan el tiempo suficiente para ser engordados y servidos en el restaurante. El resultado es una carne de excelente calidad, de un sabor y jugosidad inmejorables.

Además, es importante destacar que los propietarios comenzaron hace unos 15 años a criar sus propios bueyes. Los animales son seleccionados en criaderos de lidia y se trasladan hasta Carbonero el Mayor, donde pasan el tiempo suficiente para ser engordados y servidos en el restaurante. El resultado es una carne de excelente calidad, de un sabor y jugosidad inmejorables.
El resto de la carta
Sabíamos que El Riscal es conocido en la provincia por sus carnes pero también nos sorprendieron sus entrantes. Esperábamos encontrar la carta típica de un restaurante “clásico” pero en su carta puedes encontrar platos tan poco habituales como tuétano al horno con miel. Como nos gusta probar de todo pedimos el tuétano como entrante y disfrutamos hasta la última migaja.
Además, este restaurante se caracteriza por tener una amplia carta de vinos. Desde los más comunes hasta botellas mucho más especiales. De todos ellos es posible pedir incluso una sola copa.
A la hora del postre sabíamos qué pedir. Una amiga nos había recomendado la Flor de pastel de Queso con Frambuesa. Es una crema elaborada con un queso de oveja de la zona que resultó ser espectacular. No dejamos ni gota aunque para el postre ya no teníamos nada de hambre.
Salimos encantados de este restaurante al que sin duda volveremos. El Riscal es un lugar en el que comer carne de primera calidad en Segovia, pero es recomendable ir con hambre para poder probar el resto de su carta. Si bien el precio puede resultar elevado (unos 120 euros por pareja pagamos nosotros) no es excesivo teniendo en cuenta la cantidad y la calidad de lo que comimos.
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