Venecia es una ciudad pequeñita pero repleta de cosas que hacer. Si sigues nuestros consejos sobre cómo aprovechar tu tiempo en Venecia es muy posible que puedas hacer visitas algo especiales. Después de visitar la Plaza de San Marcos, los canales, un paseo en góndola… todavía quedan mil cosas por hacer. Nuestra principal recomendación alternativa en Venecia sería visitar el Cementerio de San Michele.
Cómo llegar al cementerio
El cementerio de Venecia es una pequeña isla conocida como «la isla de los muertos». La mejor forma de llegar hasta él es coger un vaporetto, una especie de taxis acuáticos que funcionan a lo largo de toda Venecia y las islas vecinas.
La forma más rápida de llegar es desde la parada Fondamenta Nuove, en el barrio de Cannaregio. Podemos llegar al cementerio en 10 minutos cogiendo las líneas 41 y 42, parada Cimitero. Estas líneas tienen parada en zonas más céntricas pero tardan muchisimo más en llegar al cementerio.

Además, si sigues las líneas de vaporetto que van al cementerio puedes llegar hasta la cercana isla de Murano (línea 41 y 42). La pequeña Murano es famosa por sus piezas de cristal,que son verdaderamente bellas. Una visita a esta isla está incompleta sin asistir a una demostración de sopladores de vidrio y llevarte algún detallito de recuerdo. Además, en nuestra opinión, la visita a Murano nos parece mucho más recomendable que la de su vecina Burano. Burano es una isla pintoresca por la que dar un paseo, cada edificio de un color, pero poco más. Puedes conocer ambas islas en esta excursión de Civitatis.
Qué ver en San Michele
Dentro de la isla encontramos la iglesia de San Michele en Isola, obra del arquitecto veneciano Mauro Codussi. Edificada en 1469, es la primera iglesia renacentista de Venecia. En su origen formaba parte del monasterio Camaldolese, que fue destruido en el siglo XIX.
Esta isla actúa como cementerio principal de la ciudad desde el siglo XIX. Al principio estaba dividido en dos islas, San Michele y San Cristoforo. Fue durante la invasión Napoleónica cuando el espacio de agua entre ambas islas se tapó, convirtiéndolas en la actual isla de San Michele.
Desde entonces se ha estado usando como cementerio principal de la ciudad. Actualmente, debido a la alta demanda, las tumbas sólo pueden estar ocupadas durante 10 años, después los restos se pasan al osario.

Dentro del cementerio encontramos tumbas de personajes conocidos como el escritor Ezra Pound, el compositor Igor Stravinsky, el poeta Joseph Brodsky, el fundador de los Ballets Rusos Sergei Diaghilev y el también compositor Luigi Nono, entre otros. Además de múltiples tumbas menos conocidas, pero igualmente bellas por las que pasear al sol de la mañana.
Un momento único

Cuando terminamos nuestra visita al cementerio, salimos para coger de nuevo el vaporetto. Por algún tipo de malentendido que sigo sin comprender no nos dejaron subir al primero que vino. De primeras, tener que esperar 20 minutos a que llegase el siguiente era un contratiempo pero no tardamos en darnos cuenta de que había sido una suerte. Durante nuestra espera, llegó al cementerio una pequeña embarcación con un féretro. Ése fue el verdadero momento especial de nuestra excursión: ver cómo, entre los que estaban en la embarcación y los que estaban en la puerta del cementerio, cargaban a hombros el féretro y lo llevaban de un sitio a otro salvando el vaivén del oleaje.
Por todo esto, creemos que el Cementerio de San Michele de Venecia es una gran alternativa si tienes tiempo en la ciudad. Un cementerio monumental en mitad del mar es algo impresionante. Si además, como nosotros, tienes la suerte de ver cómo llegan los difuntos a la isla es algo que no olvidarás en la vida. Además, la ventaja añadida de estar a mitad de camino de Murano hace que sea una parada cómoda y una forma ideal de pasar la mañana.
HORARIO
-De octubre a marzo de 7:30 a 16:00h. De abril a septiembre, de 7:30 a 18:00h.